Situada al noroeste de Europa, Estonia tiene la particularidad de ser país nórdico que a la vez pertenece a Europa del Este, pequeño y diverso sus paisajes, riqueza cultural y arquitectónica sorprenden a los viajeros que lo visitan.
La ciudad de Tallin, capital de la República de Estonia es un destino turístico ideal de vacaciones sobre todo para quienes desean combinar el confort del mundo moderno y el encanto de los enclaves históricos entre los que se destaca su casco medieval.
Así, el casco histórico de Tallin es considerado uno de los centros urbanos mejor conservados del mundo, situado muy cerca del centro de negocios y la zona moderna de la ciudad, recorrerlo representa un verdadero paseo por la historia.
- Tallin, la ciudad vieja y la moderna
La pintoresca ciudad medieval de Tallin, conocida mundialmente como la mejor representación de la auténtica arquitectura hanseática, propone a los visitantes pasear por sus calles adoquinadas y disfrutar de sus magníficas casas, muchas de ellas construidas en el siglo XI, además de visitar las galerías y museos sin dejar de hacer un
La ciudad medieval de Tallinn es conocida en todo el mundo por su auténtica arquitectura hanseática.
La moderna ciudad de negocios de Tallinn contrasta de manera ostensible con el casco antiguo, ya que a las antiguas casonas se imponen rascacielos hechos de acero, hoteles de primer nivel, cientos de bares, restaurantes y tiendas, ideal para aquellos que desean hacer compras y degustar la mejor gastronomía regional o internacional.
Sin embargo, el encanto fundamental de Tallin sigue siendo su casco antiguo, una ciudad amurallada que guarda nos colo numerosos monumentos sino también muchas leyendas e historias que brindan el toque mágico al visitarlo, descubriendo sus tejados coloridos y de forma cónica que forman un conjunto edilicio peculiar y encantador.
- Casco histórico de Tallin Patrimonio de la Humanidad
Declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, el casco viejo de Tallin alberga un gran tesoro histórico que comienza en la Plaza del Ayuntamiento donde se encuentra el sobrio edificio del siglo XV de estilo gótico coronado por una torre de más de sesenta metros y donde está el Viejo Tomas una peculiar veleta que según cuenta la leyenda cada año se organizaba en el lugar un concurso para ver quién podía alcanzar con una flecha al loro de madera que allí se encontraba. La auténtica veleta que data de 1530, se encuentra hoy en el museo del Ayuntamiento, mientras que la que corona el edificio en la actualidad es una réplica realizada en 1996.
Y si de leyendas se trata existe otra que asegura que en esta Plaza del Ayuntamiento fue colocado el primer Árbol de Navidad de la historia que por un incendio desapareció, pero desde entonces y siguiendo la tradición cada año se planta un pino en este lugar cada año precisamente para la Navidad.
- Las principales calles
Y si de leyendas se trata existe otra que asegura que en esta Plaza del Ayuntamiento fue colocado el primer Árbol de Navidad de la historia que por un incendio desapareció, pero desde entonces y siguiendo la tradición cada año se planta un pino en este lugar cada año precisamente para la Navidad.
La calle Pikk es la encargada de atravesar la ciudad antigua de Tallin y se encuentran allí las antiguas casas de los comerciantes alemanes con edificios que datan del siglo XV, en tanto que al norte de esta misma calle puede visitarse la Iglesia de San Olaf construida en el siglo XII, mientras que al llegar a la calle Vene puede visitarse el antiguo barrio de los comerciantes rusos con monumentos magníficos como la iglesia de San Pedro y San Pablo de 1844 y el Museo de historia de Tallin.
Ya en la parte alta del casco antiguo y sobre la colina existen ilustres edificios tales como la Catedral de Alexander Nevski, el Parlamento y la Iglesia de Toomkirik que da nombre al lugar, además del Castillo de Toompea originado en la primitiva fortaleza de 1219 de la que quedan aún algunos restos como las tres torres.
En fin, el casco antiguo de Tallin es un verdadero mundo de magia, color, arquitectura peculiar y mucha historia ideal para los amantes del arte, las leyendas y encanto de una época que ha quedado impregnado en cada rinón.
Ya en la parte alta del casco antiguo y sobre la colina existen ilustres edificios tales como la Catedral de Alexander Nevski, el Parlamento y la Iglesia de Toomkirik que da nombre al lugar, además del Castillo de Toompea originado en la primitiva fortaleza de 1219 de la que quedan aún algunos restos como las tres torres.
En fin, el casco antiguo de Tallin es un verdadero mundo de magia, color, arquitectura peculiar y mucha historia ideal para los amantes del arte, las leyendas y encanto de una época que ha quedado impregnado en cada rinón.